Vacunado!
Del tifus, del tétanus de la hepatitis A y de la fiebre amarilla. La verdad es que no tengo muy claro cuál es la prevención de cada una pero más vale vacunar que curar. De todas las posibles enfermedades contagiosas la que es más difícil de prevenir es la de la malaria, ya que no hay vacuna. El año pasado cuando fui a la India me tomé unas pastillas que tenía que tomar de manera diaria que tenían una función preventiva, pero este año optaré por el Malarone que a diferencia de las otras también son curativas para uso en caso de emergencia. Espero no tener que utilizarlas pero estos comprimidos que a nosotros nos cuestan 3€ (están subvencionadas por el Estado) en la mayoría de países en vías te cuestan más de 40€. No entraré en temas éticos con las farmaceuticas.
Yo recomiendo a todo el mundo que se vacune y que acuda a las unidades de atención al viajero. Yo fui al de Sant Boi donde la doctora Carmen y su séquito me atendieron de manera genial, incluso me dieron su mail personal por si durante el viaje tenía cualquier duda. De hecho me dijeron que seguirían el blog así que a ver si es verdad ;) Además, me llevé un folleto informativo sobre el tipo de productos que hay que llevar en el botiquín que ya explicaré en otro post. Todo un mundo.
Tema pasta: está bastante bien. En total me he gastado 39,58€ (14,00€ de visita + 7,80 administración de vacunas + 17,78€ vacuna de la fiebre amarilla).Esta última, es la única vacuna que te pueden exigir antes de entrar en un país.
A cambio, me llevo dos pasaportes más, el carnet de vacunació y el certificado internacional de vacunación.