bye bye China, hello Southeast Asia
Pues sí. Hoy es mi penúltima noche en China. La última será en el tren que me lleva de Guangzhou hasta Nanning. Pensaba que sería más difícil decirle adiós a este país, pero mi última parada, Guangzhou me lo ha puesto fácil ya que hace frío y llueve. Esta ciudad de más de 10 millones de habitantes es famosa por la comida y por las fábricas que hay alrededor que «crean» 1 de cada 3 bambas (o zapatillas o tenis) que hay en el mundo. Una sola fábrica, la Yue Yuen tiene más de 70.000 trabajadores y disponen de un hospital propio. Es por ello que uno se asusta cuando va a la estación de trenes de Guangzhou para estas fechas, ya que todos los trabajadores de la provincia vuelven a casa antes del fin de año chino, el día 3 de febrero, para poder ayudar a la familia. Ya lo dije en el post anterior, yo nunca había visto tanta gente.
El caso es que Guangzhou no me ha entusiasmado. No es su culpa, mi cuerpo me pide un cambio de aires y Vietnam es el destino elegido. Después iré a Cambodja, Laos y Tailándia.
¿Cómo cruzar la frontera hasta de Hanoi?
Mi trayecto será de Guangzhou a Nanning, unas 11 horas en tren y que me ha costado unos 20€ en hard sleeper. Ahí tendré que cambiar de estación para coger un bus (15€) que después de 3 horas me llevará hasta la frontera, en Pingxiang, que cruzaré andando. Después, subiré en el mismo bus que tras 4 horas me dejará en Hanoi. En total algo más de un día. Pero he decir que me motiva. Nunca había cruzado una frontera a pie y es una sensación extraña y mucho más interesante que hacerlo en avión.
Corrección día 06/01 = el tren a Nanning llega a la estación de trenes que está a unos 10 minutos en taxi de la estación de autobuses donde se coge el bus dirección a Hanoi. Son unos 30 rmb. Cogi el bus de Nanning a las 09:00 y a las 17:00 estaba en Hanoi. Recuerda que es una hora menos.
Mi próximo post, desde Vietnam.