Y Mama Naxi el mejor hostel para disfrutarlo. Poco se puede decir al respecto, así que os dejo las fotos para que lo valoréis vosotros mismo:
Yunnan es una de las provincias más mágicas de China. A parte de poseer un paisaje privilegiado, las cumbres tibetanas en el norte y las selvas tropicales en el sur. A parte de eso, también destaca que el 50% de la provincia no está habitada por los han, el grupo mayoritario aquí en China. De hecho, es muy común ver musulmanes que llegaron aquí en la época de Genghis Khan. Pero de todas las etnias, hay dos que destacan por encima del resto, los naxi y los mosu. Las dos son sociedades matriarcales y las mujeres mosu son famosas por el fenómeno» matrimonio ambulante», es decir nunca se casan ni cohabitan con ningún hombre y pueden tener todos los amantes que deseen a lo largo de su vida. Los naxi, también tienen connotaciones con fuertes influencias matriarcales. Como ejemplo, un botón: la palabra «piedra» más femenino significa gran piedra. En cambio «piedra» más masculino es un guijarro.
Curioso, no?
Más allá de eso, mi llegada al Yunnan, a Kunming concretamente, se centraba en intentar cruzar a Birmania por la única frontera terrestre posible, pero el gobierno birmano me ha fastidiado el plan y han cerrado la frontera, por lo que tendré que esperar. Mi plan B es conocer en profundidad esta provincia y avanzar hacia el este de China.
Por ahora, me he limitado a disfrutar de Kunming, dejando la guía en la habitación y simplemente dejándome llevar. A cambio, me he llevado paseos por mercados, buenísima comida y un masaje en los pies de más de una hora por 5€. Y todo ello acompañado del sol. Aunque de todo, lo que más me ha fascinado es la cantidad de gente mayor que hay en esta ciudad, que a diferencia de nuestros ancianos, éstos tienen una energia envidiable y se pasan el día haciendo ejercicio y llenando de energia toda la ciudad.
Pero la tranquilidad se acaba y esta noche me voy a Lijang para hacer un trekking por la famosísima Gargante del Tigre. Después avanzaré hasta la mística Shangri·la y terminaré en Dali.
Y después ya veremos qué hago con mi vda…