Adrien es un francés de mi edad que conocí la primera noche que llegué a Yangshuo en el concurso de cerveza y acabamos cerrando los bares. Congeniamos rápido y nos hicimos compañía los días que coincidimos en Yangshuo. También está viajando solo y durante un largo tiempo. Parte de su ruta coincide con la mía por lo que creo que coincidiremos pronto.
Y con nosotros estaba Kenny, un chico joven de la provincia de Guangzhou que estaba en el hostal donde me alojaba. The best roof in Yangshuo decía el cartel. Y es cierto, pero debería decir el mejor barman de China. Un chico simpático, con las ideas claras y tremendamente agradable. Jugamos al billar, les hablé de vosotros, le enseñé fotos vuestras y algún que otro vídeo que me dedicasteis cuando me fui. Un gran tipo con el que espero seguir en contacto.
Hong Kong y Macau creo que son dos lugares para vivir pero para viajar no recomiendo dedicarle más de 2 días. Me explico: Hong Kong es una colonia inglesa y Macau portuguesa, por lo que su historia es tan reciente que en el primero la eluden con rascacielos y juegos de luces y en el otro con casinos. Además son sitios caros. Tan caros como Europa en muchos aspectos. Aún así, si estás cerca y tienes la ocasión de visitarlos es interesante ver el contraste y la huella que ha dejado occidente en culturas milenarias como la China.
Hong Kong es el lugar donde más Ferraris he visto en un día. Y en Macau he visto la decadencia vestida con faldas corta y escotes apretados paseándose por los pasillos de los Casinos esperando a que un chino afortunado por el juego las invite a subir a la habitación.
Los dos son sitios limpios y extremadamente eficaces. El transporte público funciona mejor que en cualquier país del mundo, y eso se agradece. Son Estados jóvenes con su propia moneda y donde jóvenes europeos y americanos buscan su primer trabajo fuera de la cuna materna.
En definitiva, visitálo pero avisado estás, así que rebaja expectativas y prepara la cartera.
Para ahorrarte un dinero y sobretodo tiempo, recomiendo que os saquéis la Octopus Card que cuesta 150 dólares de los que os devuelven 50 cal final del viaje.
Lo que + me ha gustado…
la compañía.
Lo que – me ha gustado…
lo excesivamente caro que es (lo he visitado en Fin de Año).
Tras algo más de 24 horas. 1 tren, 2 autobuses, 2 fronteras y 1 taxi, ya estoy en Hanoi. La recibida que he tenido no ha sido muy emotiva ya que el cielo está nublado y cae una llovizna típica de la época. No puedo olvidar que es invierno y a pesar de que el norte de Vietnam es un clima sub tropical, hace el suficiente frío como para no poder ir en pantalón corto.
En cualquier caso, han bastado un par de minutos para captar la caótica esencia de esta ciudad. De hecho, solo basta cruzar la frontera para ver que el orden, en este país, es relativo. El ruido de los cláxones forman parte de la ciudad como el mar lo es en Barcelona, las cañas en Madrid, o las tapas en el sur. El caos del tráfico está a la altura de Beijing o Atenas aunque no supera Nueva Delhi.
Aquí es más común ver occidentales y en las pocas horas que llevo en la ciudad ya me he reencontrado con «viejos» conocidos.
El Hanoi nocturno pinta bien. De hecho en el Hostel Hanoi en el que me hospedo me han recibido con un free beer de 18:00 a 19:00 y Pulp Fiction en el televisor. A ver qué tal es el Hanoi de día. Pero eso tendrá que esperar a mañana.
Pues sí. Hoy es mi penúltima noche en China. La última será en el tren que me lleva de Guangzhou hasta Nanning. Pensaba que sería más difícil decirle adiós a este país, pero mi última parada, Guangzhou me lo ha puesto fácil ya que hace frío y llueve. Esta ciudad de más de 10 millones de habitantes es famosa por la comida y por las fábricas que hay alrededor que «crean» 1 de cada 3 bambas (o zapatillas o tenis) que hay en el mundo. Una sola fábrica, la Yue Yuen tiene más de 70.000 trabajadores y disponen de un hospital propio. Es por ello que uno se asusta cuando va a la estación de trenes de Guangzhou para estas fechas, ya que todos los trabajadores de la provincia vuelven a casa antes del fin de año chino, el día 3 de febrero, para poder ayudar a la familia. Ya lo dije en el post anterior, yo nunca había visto tanta gente.
El caso es que Guangzhou no me ha entusiasmado. No es su culpa, mi cuerpo me pide un cambio de aires y Vietnam es el destino elegido. Después iré a Cambodja, Laos y Tailándia.
¿Cómo cruzar la frontera hasta de Hanoi?
Mi trayecto será de Guangzhou a Nanning, unas 11 horas en tren y que me ha costado unos 20€ en hard sleeper. Ahí tendré que cambiar de estación para coger un bus (15€) que después de 3 horas me llevará hasta la frontera, en Pingxiang, que cruzaré andando. Después, subiré en el mismo bus que tras 4 horas me dejará en Hanoi. En total algo más de un día. Pero he decir que me motiva. Nunca había cruzado una frontera a pie y es una sensación extraña y mucho más interesante que hacerlo en avión.
Corrección día 06/01 = el tren a Nanning llega a la estación de trenes que está a unos 10 minutos en taxi de la estación de autobuses donde se coge el bus dirección a Hanoi. Son unos 30 rmb. Cogi el bus de Nanning a las 09:00 y a las 17:00 estaba en Hanoi. Recuerda que es una hora menos.
Mi próximo post, desde Vietnam.
Repito. Hong Kong NO es China. Quizás se le parece en algunas cosas, pero NO lo es. Por lo que el que viaje a Hong Kong que no se piense que conoce China. Hong Kong, como buena colonia que fue, se parece más a una ciudad europea que a una china. Al menos esa ha sido mi percepción.
Los ingleses se apoderaron de Hong Kong en la Guerra del opio. Aquella guerra en la que los ingleses comercializaban el opio de Asia y lo distribuían por todo el mundo. Los chinos, siempre tan puros con estos temas, se opusieron y decidieron quemar todo el opio. Pretexto perfecto para invadir Hong Kong y apoderarse de un puerto que significó la entrada al mercado asiático.
Desde entonces Hong Kong fue una colonia británica. No se escupe, no se habla mandarín (tampoco inglés), todo está limpio y hay un orden anti-natura que para el viajero molesta, aunque no para el que vive ahí. Hong Kong es 10 veces más caro que China. 10. Y ahí rompo un tópico: Hong Kong no es el paraíso de las compras. Bueno, lo es si te quieres comprar un Ferrari, una anillo en Tiffany’s o un Rolex, pero en ese caso seguramente no estarías leyendo este blog. En Hong Kong no pagan tasas por lo que los objetos de lujo pueden ser una buena compra, pero no lo demás. Hay que buscar y mucho para encontrar la ganga. Yo recomiendo ir a los outlets, lo más alejados posibles de Hong Kong y en Temple street. Ahí encontré unas New Ballance por menos de 40€.
La eficiencia es su principal valor. Un ejemplo: a pesar de ser una isla tienen el mejor transporte público del mundo (que yo haya visto). Tienen una tarjeta, la Octopus card que sirve para todo, hasta para pagar los cafés en el Starbucks. Y puedes hacer chek-in y facturar la maleta desde Plaza Catalunya o Atocha de Hong Kong y así te olvidas de cargarla hasta el Aeropuerto. Vamos, una idea brillante.
A pesar de todo, he de reconocer que Hong Kong debe ser un buen sitio para vivir, pero para viajar no invertiría más de 3 o 4 días. En caso de que vayas, no debes perderte Lantau y el Buda gigante.
Y ahora, de vuelta a China. Por poco tiempo, pero ya ha sido suficiente para darme cuenta que la comodidad de Hong Kong era un espejismo. Hoy para comprar un billete de Guangzhou a Nanning he tardado más de 3 horas. Creo que nunca en mi vida había visto tanta gente en tan poco metro cuadrado. No exagero; China rules, again!
PD: en menos de 40 años Hong Kong dejará de tener un régimen especial y será una provincia china más. Mi pregunta es: ¿Hong Kong se adaptará a China o China a Hong Kong?
Macau. Quizás algunos no sepáis ni dónde está. Yo, la verdad sabía muy poco de este Estado. Sí, es un Estado en el que te sellan el pasaporte aunque al igual que en Hong Kong, los europeos no necesitamos visado.
Es una antigua colonia portuguesa, por lo que por las calles todo está en portugués. Aunque nadie lo habla. Y si es famoso por algo es por los Casinos y todo lo que ello conlleva. Un dato, en 2006 facturó más que Las Vegas.
El caso es que he pasado fin de año en este peculiar lugar y seguramente, nunca olvidaré cómo cerré el año del 2010. Un año increíble.
PD: a pesar de que los juegos se me dan fatal gané 50€ apostando 5€ al 9. Así que ya tengo número de la suerte para este 2011.
A pesar de que no me llevo muy bien con la Navidad quería aprovechar que estoy en Hong Kong, recién llegado, para desearos a tod@s unas muy felices Fiestas. Y es que cualquier excusa es buena para celebrar algo con tus seres queridos (que palabra más fea). Así que comed y bebed, pero sobretodo a quererse mucho.
Yo lo «celebraré» en Hong Kong, matando mosquitos (o ellos a mi) y yendo a dormir pronto, como un niño bueno, que mañana llegan los regalos ;)
Bon Nadal!